Leucodistrofia relacionada con POLR3/Leucodistrofia 4H
Epidemiología La prevalencia de la leucodistrofia relacionada con POLR3 es desconocida, y se han identificado individuos afectados en diferentes regiones del mundo.
Descripción clínica La leucodistrofia relacionada con POLR3 es una enfermedad hipomielinizante que presenta cuatro hallazgos clínicos principales:
- Disfunción neurológica, principalmente disfunción motora como disfunción cerebelosa progresiva, extrapiramidal (distonía), piramidal (espasticidad) y disfunciones cognitivas.
- Dentición anormal, que incluye dentición retrasada, hipodoncia, oligodoncia y dientes colocados o en forma anormal.
- Anomalías endocrinas, como estatura baja en aproximadamente el 50% de los casos, con o sin deficiencia de hormona de crecimiento, y más comúnmente, hipogonadismo hipogonadotrópico que se manifiesta como pubertad retrasada, detenida o ausente.
- Anomalía ocular, caracterizada por miopía progresiva durante varios años.
La leucodistrofia relacionada con POLR3 y la leucodistrofia 4H son términos utilizados para describir cinco fenotipos clínicos diferentes:
- Síndrome 4H (Hipomielinización, hipodoncia, hipogonadismo hipogonadotrópico)
- ADDH (Ataxia, dentición tardía e hipomielinización)
- TACH (Temblor-ataxia con hipomielinización central)
- LO (Leucodistrofia con oligodoncia)
- HCAHC (Hipomielinización con atrofia cerebelosa e hipoplasia del cuerpo calloso)
La edad de inicio suele ser en la primera infancia, pero también se han notificado casos de inicio tardío.
Diagnóstico El diagnóstico de la leucodistrofia relacionada con POLR3 se realiza mediante la combinación de hallazgos clínicos, características típicas en la resonancia magnética cerebral (IRM) y la identificación de variantes patógenas bialélicas en los genes POLR3A, POLR3B o POLR1C.
Evaluaciones tras el diagnóstico inicial Una vez realizado el diagnóstico, se recomienda realizar una serie de evaluaciones para determinar el alcance de la enfermedad y las necesidades del paciente. Estas evaluaciones pueden incluir:
- Consulta de neurología pediátrica.
- Evaluación de la deglución.
- Evaluación de fisioterapia.
- Evaluación de terapia ocupacional.
- Evaluación de patología del habla y lenguaje.
- Consulta del médico de rehabilitación (fisiatra).
- Evaluación neuropsicológica.
- RM cerebral, si aún no se ha realizado.
- Consulta de odontología.
- Consulta endocrina.
- Evaluación oftalmológica.
- Consulta con especialista en oído-nariz y garganta para problemas de hipersalivación y deglución.
- Consulta con un genetista clínico y/o consejero genético.
Tratamiento de las manifestaciones El tratamiento de la leucodistrofia relacionada con POLR3 se realiza mediante un enfoque multidisciplinario, que incluye un equipo compuesto por neurólogos pediátricos, genetistas clínicos, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, patólogos del habla y del lenguaje, neuropsicólogos, médicos de rehabilitación, dentistas, endocrinólogos, oftalmólogos, especialistas en oído-nariz y garganta, y médicos primarios. El cuidado médico individualizado es fundamental para abordar las diferentes manifestaciones clínicas.
Es importante tener especial cuidado en el manejo de la disfagia, ya que puede variar ampliamente incluso en un solo día. Además, la distonía debe ser monitoreada y tratada para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida del paciente.
Agentes / circunstancias a evitar Se deben evitar alimentos que puedan provocar asfixia y medicamentos que actúen sobre los bloqueadores del receptor D2 (como neurolépticos y medicamentos contra las náuseas), ya que estos pueden exacerbar las características extrapiramidales.
Asesoramiento genético La leucodistrofia relacionada con POLR3 se hereda de manera autosómica recesiva. Las pruebas de portadora para los familiares en riesgo y el diagnóstico prenatal para embarazos con mayor riesgo son posibles si se conocen las dos variantes patógenas en la familia. Se recomienda asesoramiento genético para abordar las implicaciones hereditarias de la enfermedad.